Por: Héctor L. Matías Vélez
¿Qué son los celos? ¿A caso son una cualidad humana o divina?
La Biblia nos dice en 2 Ti. 3:16-17 RVR1960
Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.
También nos dice otra cosa: Stg. 1:5-6 RVR1960 a Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra.
Sabemos que cuando Dios nos creo nos hizo a su imagen y semejanza, pero cuando el pecado entró en nosotros, todo lo bueno que había en nosotros se corrompió, a tal punto, que los celos hoy en día son una de las principales causas de trastornos de personalidad, provocando ansiedad, pobre autoestima, miedo a la pérdida; y en casos extremos al homicidio y suicidio.
Poniendo esto en claro vamos a ver que nos dice La Biblia con relación a los celos y el perdón.
CELOS
Ex. 20:4-5 RVR1960
No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen,
Ex. 34:14 RVR1960
Porque no te has de inclinar a ningún otro dios, pues Jehová, cuyo nombre es Celoso, Dios celoso es.
Dt. 4:24 RVR1960
Porque Jehová tu Dios es fuego consumidor, Dios celoso.
Él es Celoso para con Él mismo y demanda nuestra exclusividad y eso es lo que hace que muchas veces nuestros celos nos destruyan de poco a poco. Si tu amas lo suficiente, pero tus celos sobrepasan ese amor al punto que te hace daño el amor está en peligro.
PERDÓN
Mi. 7:19 RVR1960
Él volverá a tener misericordia de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados.
Is. 43:25 RVR1960
Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados.
Nosotros que apenas somos polvo en las manos de Dios, vivimos amargados pensando en que yo no puedo perdonar, pero si quiero que otro me perdone y que Dios también me perdone.
Seamos sinceros, no exijamos lo que no podemos dar. Bendecidos.